viernes, 7 de diciembre de 2007

La visita inesperada

Llegó el Emperador, con pizzas y con su abrazo. Y me salvó la vida esta noche, como hace muchas noches. Cenamos, fumamos y hablamos. Pusimos el mundo patas arriba, intentamos resolver el sudoku, del derecho y del revés, nos probamos camisetas de colores, agitamos banderas, jugamos al Cluedo, tradujimos canciones, le prendimos fuego al diccionario, hicimos la mili, trabajamos para el KGB, vimos películas sin sonido, pusimos voces a otros, atrasamos el reloj, lo adelantamos de nuevo, abrimos y cerramos puertas, perseguimos al conejo blanco, corrimos la maratón hacia delante y hacia atrás, nos dimos la razón, nos la quitamos, lanzamos cosas por la ventana (palomas mensajeras y paquetes de cigarrillos), nos hicimos un nudo con el Twister, procuramos barrer el serrín, nos contamos cuentos y adivinanzas, planeamos ofensivas, aullamos a la luna, rompimos cadenas, movimos fichas en el tablero, resolvimos ecuaciones y hasta pedimos a los Reyes Magos un bate de baseball.

Me hiciste pensar, y dudar, y ver caminos nuevos. Y, como siempre, me hiciste reír cuando parecía imposible. De nuevo lo cambiaste todo y ahora la noche es distinta. Ahora es bonita. Gracias, César. Por conseguirlo siempre. Te quiero.

4 comentarios:

Rogorn dijo...

Buaah, yo quiero de eso también, y erm...

Bueno, eso. Ya hablamos, jeje.

Anónimo dijo...

Es curioso como alguien puede valorar más lo nuevo a lo cotidiano. Quizás el darle un nuevo enfoque a todo sea la clave

Lenka dijo...

Hereje, sabes que también tenemos de eso, también te lo abradezco y también te lo posteo. Y te lo seguiré posteando, no lo dudes.

Anónimo... no sé qué será para ti lo nuevo ni lo cotidiando en esta historia. Yo valoro a mis amigos (los nuevos y los de siempre) y valoro lo que amo, sea nuevo o cotidiano.

Jose dijo...

Tienes suerte Len, gente asi hay muuuuy poca en este mundo ¿sera la lluvia?¿sera la humedad?¿sera la sidra?....;)