jueves, 9 de julio de 2009

Solicita como puedas


El lunes por la tarde me avisa una persona cercana de la existencia de unas maravillosas ofertas de trabajo. Se necesitan curreles de lo mío (de lo primero mío, no de la cosa masajística) en una asociación de probada solvencia (ole, qué novedad, estos no se quedarán sin presupuesto, al menos) y para un contratito de un año máximo (lo de siempre). A postular tocan.

Primero busco las ofertas susodichas en la página de empleo de dicha entidad. Nada. Cero. El plazo de solicitud finaliza el jueves, no comprendo cómo es que no existen noticias al respecto. Al menos oficiales. Ergo deduzco que, efectivamente, no es que haya que tener padrinos para conseguir un curro, es que hay que tenerlos incluso para enterarte de que lo ofrecen. Fantástico. Cuántas personas no tendrán la menor idea de estas ofertas? Cuántas veces sería yo la que no se enteró? Calculen.

Mi confidente no tiene internet en casa, así que se planta en un ciber y empieza a enviarme correos con los impresos en cuestión. Tampoco se explica dónde hay que entregar dichos impresos. El chivato tira de contactos (porque los tiene, que si no, de qué) y me informa al cabo de una tensa espera. Vetusta. Bien, pillaré el alsa. No hay problema. Decido poner bello mi currículum y añadir una reciente experiencia, pequeña pero interesante, porque tiene mucho que ver con la entidad de marras. Horreur. No tengo impresora, claro. To dios está de vacaciones. No sé dónde hay un ciber en mi barrio. No importa, se compra una impresora y listo, así nos evitamos problemas en el futuro.

Ojeando la página de la requetenombrada entidad, descubro que prefieren a las personas recomendadas, es decir, las referencias vuelven a estar de moda. Glubs. Llamo a mi ex jefe (muerta de vergüenza, porque me matan estas cosas) y le pido el favor. Mujer, por Dios, faltaba más. Ahora mismo te redacto un hermoso informe. Pero mejor vente mañana a por él, porque cerramos ya en breve. Cómo no, señor mío, a sus pies. Al día siguiente agarro el autobús y vuelo a por las referencias. Otro paso completado. Regreso al hogar y me fijo, por primera vez desde la mudanza, en el flamante búho que adorna la fachada de la droguería del barrio. Buena señal, quizá? Intento meter mis divinas recomendaciones en la página web, pero no. Que así no vale. Que tengo que meter el nombre y el mail de mi ex jefe para que ellos mismos mismamente se encarguen de interrogarle sobre mi persona. Estupendo. Bueno, al menos me servirán para el puesto concreto que persigo.

Compruebo todos mis papeles y siento un pálpito. Más que un pálpito, una revelación. Qué tal si imprimo también la solicitud y la llevo debidamente cumplimentada? Eso haré. Datos, títulos, cursos, experiencia... todo puntúa. Tienen hasta baremos. Tantos meses currados, tantos puntos. Tantas horas de cursillos varios, a equis. Valdrá todo lo que pongo? Me descartarán cosas? Bueno, pongámoslo todo, ya cercenarán ellos. Llega el jueves. Cojo el autobús que me deja junto a la estación, cojo el alsa, volamos a Vetusta. Encuentro las oficinas de la entidad, y compruebo en mis carnes que las muchachas allí colocadas pasan de mí. Me hago notar. Me reciben. Y empieza la crisis.

"Así que sólo optas al puesto con referencia 17?" Ein? A ver, había dos puestos: uno de diez horas semanales y otro de veinte. Prefiero el de veinte, la verdad. "No, es que para las veinte horas hay tres referencias distintas". Perooo... cuántos puestos se ofrecen? "Pues no lo sé, pero hay tres referencias". Peroooooooo... si las horas, el sueldo, el cargo y todo lo demás es lo mismo... "Pero es que está organizado así. Si quieres más opciones tienes que presentarte a las tres referencias. Una solicitud por cada una". Toma ya. Menos mal que me he traído mi copia impresa y cubierta. "No has sumado los méritos". Eeeeeh, nop. Creí que eso lo hacíais vosotros, yo no sé qué me vais a dar de paso y qué me vais a descartar. "Pero tienes que sumarlo tú y anotarlo. Luego nosotros ya vemos". Vaaaale, entendido. Pues entonces necesito más copias para las otras referencias. "Creo que hay un kiosco en la esquina con fotocopiadora". TOMA YA. No te dan las instancias!!! Claramente vi la luz cuando decidí imprimirlas, más aún cuando compré la impresora!!! Pueees, nada. Voy al kiosco ese. "Ah, por cierto, un currículum por cada referencia. Y mejor date prisa, que el plazo termina en una hora, bonita".

Vuelo al kiosco. Entrego mis papeles. Deme copias de TODO. Varias. La máquina se atasca. Lo juro. El señor se pelea con el engendro de satanás. Salen las copias. Vuelo a una cafetería. Me tomo una tónica mientras relleno cual posesa. Referencia 18... curso de animación sociocultural... mmmm... sí, informática... 0,4 por 15 meses curraos... más la formación y me llevo una... lo tengo, lo tengo. No, no lo tengo. Me falta un papel. Pago, vuelo al kiosco. Oiga, que me falta una copia!!! Ah, pues sí, está aquí, perdona, maja. Traigapacáquelomat... esteeee... nada, nada, no se preocupe. Apuf, apuf, yastá, señorita, lo he conseguido. Y, además, traigo unas estupendas referencias que... "No se admiten referencias". Sin comentarios. Las piden, sí, pero no se admiten. Ni en la web ni en persona. Fale. Las 11:45. Menos mal que decidí venir con tiempo de sobra. Yo, la Emperatiz del Último Segundo. Respiro. Vuelo a la estación. Al baño, concretamente (me meo, me meooooo!!!) Din, dan, don, dingggg!!! "Autobús procedente de (añádase el lugar de residencia de mi confidente), dársena no sé cuántitos". Otra señal?

Subo al alsa. Salimos. Me fijo, pasmada, en que todo el mundo lleva puesto el cinturón. Albricias. Se ha concienciado toda la población menos yo? Procedo a ponerme el mío. No funciona. He recorrido esa autopista un millón de veces, pero nunca me había sentido inquieta. Maldita superstición. Nervios. Mantras. Mujer, ya sería casualidad. Pero ah, amiga, las casualidades existen. Frenazo descomunal, quejidos de la peña, salgo cuasi despedida del asiento, pero me agarro a tiempo. En lontananza humean las chimeneas de la fábrica del Trasto. Los hados del Acero me salvan. Yupi. Llegamos a Gigia. Cartel gigante en la rotonda. Nuevas viviendas cerca de mi barrio, que sigue creciendo. Promoción. Un nombre. Uno de los muchos nombres con que bautizaron estas tierras los diversos conquistadores. El mismo nombre que ostenta el certamen literario al que llevo días dudando si presentarme. De nuevo señales del cosmos? Vaaaale, me presentaré. Por fin estamos en mi pueblo. Cojo el autobús. Media hora de reloj en atravesar una avenida. Jueves. La manifa de rigor. Atascos. Ole, ole, las fuerzas del orden! (Jamás me había alegrado de verles) Las fuerzas prescinden de poner orden en el caos. Me restrego los ojos. Pero sí, en efecto, están charlando en una esquina. Pitidos, frenazos, broncas. Ellos ríen, encantados de haberse conocido.

Llego a casa, saco a la Fújur, hago la comida. Llega el Trasto, zampamos, nos contamos las mañanas. Tecleo un rato. El sofá me envuelve con sus cánticos. Es el descanso del guerrero. Misión cumplida. Y, ahora, a esperar.

13 comentarios:

Rogorn dijo...

Tú solicita y presenta, que ya sabrás por los perros y gatos que el que no llora no mama. Ni hace pis.

Guaja dijo...

Hija mia, menuda mañanita!!!. A ver si sale algo, malo sera, con tantas referencias ... .
Y presentate al concurso literario SHA!!!

Marechek dijo...

A ver si hay suerte Len porque te lo mereces y porque verdaderamente es tu vocación y serás perfecta pal curro seguro. Concurso literario?????... ya tas tardando bonita... Besosssss

Kaken dijo...

Bien hecho, Le-ona¡¡
Mucha mierda ;-)

Lal dijo...

Ahhh! qué estrés!!!!
Bueno, pasó y ahora solo queda cruzar los dedos :)
Suerte!

Lenka dijo...

Gracias a todos!!

(Es que lo releo y me canso, os lo juro!!!!)

Cris dijo...

Qué estrés!!!
Menos mal que ya ha pasado. Ahora toca esperar. Mucha suerte, ojalá te lo den.
Besos.

Lenka dijo...

Asias, Cris!! Seguiremos informando ;)

Alberich dijo...

Jodo,q agooobio!!

Suertee!!!

Lenka dijo...

Gracias, Doc!! Sigo con los dedos cruzados!!!

Eli dijo...

Guapis, más vale tarde que nunca (es que he estado perdida por ahí) pero ojalá, ojalá que ésta sea la refinitiva.
Besos, ya estoy cruzando las orejas.

Anónimo dijo...

Hola, Lenka. Que tengas mucha suerte con lo del curro.Preséntate al concurso literario.

Lenka dijo...

Gracias, chicos, aunque este puesto ha salido tan en secreto, tan de boca a oreja, que ni siquiera se sabe cuándo, cómo y dónde será la selección. No os mosquean estas cosas? No suenan muy malamente? Creo que hasta en una agencia de espionaje habría más claridad a la hora de ofrecer trabajo. En serio, estos procesos de selección en plan fantasma se dan más de lo que pensamos, y me tiene la cosa de lo más mosca.