lunes, 18 de mayo de 2009

Las Rosas Regás y los pavonazis


Todos los fines de semana escucho La Rosa de los Vientos, y después, por pura pereza, dejo la radio encendida, lo que significa que me duermo con Salas y me despierto con Herrera. Estoy tan acostumbrada al ritual que casi me cuesta dormir sin ese runrún de vocecitas de fondo. Hoy he vuelto al mundo de los vivos oyendo comentarios sobre Eurovisión a los que no hice demasiado caso y más tarde un par de anécdotas a las que tampoco habría prestado mayor atención de no ser por el desafortunado comentario final. Os cuento.

Charlaban Herrera y sus contertulios y uno de ellos mencionó que, según palabras de Luis Aguilé (del que sólo recuerdo algunas imágenes en blanco y negro en programas nostálgicos, y que desde mi óptica de niña era un gigantón con pinta de borracho graciosete) el susodicho se había acostado con trescientas mujeres antes de sentar la cabeza. Bien. Vale. Risas cómplices y un par de bromas sobre si las señoras creerían que el desmesurado tamaño de sus corbatas era indicativo de otros tamaños más interesantes.

A renglón seguido, se nos cuenta que la escritora Rosa Regás ha dicho tajantemente haber follado todo lo que ha querido en la vida, especificando además que, si se le retrasaba un vuelo, aprovechaba la obligada espera en el aeropuerto para echar un polvo con algún desconocido. No hubo risas cómplices, ni aplausos a la brava señora, ni siquiera alguna chanza sobre lo morada que se habrá puesto si solía volar con Iberia. El comentario fue: "viéndola ahora, quién diría que tuvo tal poder de seducción?"

Rosa Regás es una mujer mayor, por lo que, en nuestra cultura de culto al cuerpo dictatorial en la que una actriz de cuarenta años es poco menos que una anciana, podemos afirmar que ya la consideramos (a la escritora) invisible, asexual y con un pie en la tumba. Cosa que no nos ocurre con Connery, con Julio Iglesias o con el anteriormente citado Luis Aguilé, que, francamente, nunca fue un Adonis. Existe, desde luego, un feminismo radical y feminazi, y existe un machismo radical, nazi y castrante. Y luego existe el otro machismo, ese tontorrón, infantil, bobo de baba, asumido, normalizado y corriente que, si me permitís, voy a bautizar como "pavonazi", porque es al mismo tiempo una perpetuación de la imbecilidad adolescente y una exhibición bastante ridícula de hombres pavo real.

Hugh Heffner es un héroe para muchos, genio y figura, un tipo divertido, un vividor, qué bien se lo monta (y se las monta), toma ya, con dos cojones. Cómo nos reíamos con el doctor Iglesias Puga, siempre dispuesto a contarnos sus hazañas de Tenorio. Son legión los hombres ilustres que han puesto cifra a sus conquistas, que se han rodeado hasta el final de nínfulas hermosas y nos han admirado por sus ganas de vivir y su alegría. Con qué saña, sin embargo, hemos tratado siempre a la mujer madura que ha conquistado al hombre joven. Qué ridícula la hemos considerado siempre. Como si ser un abuelo en batín, adicto a la viagra y rodeado de pencas tetudas vestidas de conejas no fuera también abrumadoramente ridículo, hortera a más no poder y ligeramente patético. Por qué entonces lo uno nos parece admirable y lo otro no?

Le buscamos a todo razones biológicas, químicas, neurofisiológicas y la madre del cordero. Pero no dejo de pensar que, al fin y al cabo, por exacta que sea una ciencia, no siempre se libra de nuestra interpretación. De nuestra visión, nuestros prejuicios, nuestra moral, nuestras costumbres. Nos han dicho que el macho es infiel por naturaleza, que es conquistador, seductor, no puede evitarlo. En su instinto está propagar la semilla. Y, como puede propagarla hasta el fin de sus días y la mujer no, pues qué le vamos a hacer. No es machismo, es la naturaleza. Por eso el macho busca hembra joven y fértil. No es por vicio. Es memoria genética.

Lo que nunca nos dicen es que, quizá por esa regla de tres, la mujer es por naturaleza promiscua, buscando siempre el mejor partido para sus cachorros, la mejuor herencia posible, el néctar más poderoso. No nos han dicho que quizá lo más natural sea que ellas piquen de flor en flor, siempre subiendo el listón. No por vicio, claro. Y que, una vez llegada la infertilidad, que se vuelvan aún más promiscuas, con la esperanza de encontrar a un macho que cuide de ellas en la vejez. Uno más joven y fuerte, naturalmente. Con la ventaja, además, de no acarrearle el esfuerzo añadido de ampliar la prole. Mientras tú, querido efebo, esparces la semilla entre las mozalbetas, conmigo puedes estar tranquilo. Conviérteme en tu reina madre. Pero no, parece que la biología sólo justifica lo que quiere justificar.

Este machismo infantilón no sólo niega el presente y el futuro a la mujer madura. Le niega, además, su pasado. Pasada cierta frontera la mujer no sólo ya no es, es que no fue. Queda borrada, anulada. No es sólo que Connery sea un galán a sus casi ochenta años y en cambio Meryl Streep no sea una mujer fatal a sus sesenta (sí, habéis calculado bien, son exactamente veinte añazos menos), es que no lo fue nunca. Para eso tendría que haberse muerto joven, como Monroe, o retirarse del mundo, como Greta. Cualquier cosa antes que obligarnos a ver su decrepitud. Rosa Regás (adoptada inmediatamente entre mis queridas Mujeres Malas) fue joven, por si lo dudáis, y fue lozana, rozagante, hermosa, carnal y llena de vida. E hizo muy bien si se folló a todo lo que se movía haciendo muescas en los lavabos de los aeropuertos. Y haría muy bien si hoy día siguiera moviendo las caderas siempre que tuviera ocasión. Aunque nos pareciera sumamente estúpida y ridícula, nos diera una lástima no exenta de crueldad y envidia malsana. Aunque nos obligara a pensar que nuestras abuelas, nuestras madres, nuestras hermanas, esposas e hijas (horror!) también follaron todas ellas lo que quisieron o pudieron, y muchas de ellas menos de lo que deseaban, y otras muchas más de lo que confesarían seguramente por miedo a que algún corrillo de cincuentones pavonazis y vanidosos se rieran por lo bajo descreídos.

20 comentarios:

Kaken dijo...

Me alegra saber que hemos estado oyendo lo mismo a la misma hora, Lenka.
Y sí, me chirrió el comentario sobre Rosa Regás, pero no caí en la cuenta de lo que tu tan bien describes, me quedé colgada de una corbata que jamás encontré atractiva y sorprendida de la supuesta veracidad de ese dato amatorio.
Estoy de acuerdo contigo en el fondo de la cuestión, en que aún hay diferencias en el sentido que refieres.
Pero creo que a Aguilé tambien le han dado su torta con guante, pues parecía que no se explicaban su atractivo como no fuera por sus largas corbatas y lo que de ella podía inferirse.

Sin embargo pienso que este tema está cambiando, con el tiempo será más normal ver mujeres con hombres más jóvenes, de hecho, ya se ensalza y se muestra.

El paso más dificil, el de que cada cual esté con quien quiera y como quiera, llegará....y quién no se entere, mucho peor para el¡

Muy buena entrada, como me gustaría que la enviaras al programa, si son el tipo de personas que percibo, me da que no caería en saco roto.

Un bes¡

Lenka dijo...

Gracias, Kaken, celebro ver que no soy la única a la que le pitan a veces las orejas. Es una sensación familiar, pero no por eso deja de molestar un poco. Y es más, estoy dispuesta a que me siga incomodando, porque no son cosas a las que quiera resignarme. Amargarme tampoco, no merece la pena. Pero al menos detectarlas, que no me pasen desapercibidas, porque sería como darlas por buenas.

Fíjate, también yo pensé en enviarlo al programa. Pero sabes? Prefiero no hacerlo. Por dos razones. En primer lugar porque no pretendo "convertir" a nadie. En serio que no. Creo que algunas cosas requieren tiempo y otras están sencillamente a destiempo. Ejemplo tonto: he podido convencer a mi abuela de que no iré al infierno por no casarme de blanco, porque, seguramente, a Dios le ofenden más otras cosas. Pero no pienso ni intentar convencerla de que el intercambio de parejas (aunque no lo practique) es una opción libre y respetable que no convierte a sus usuarios en degenerados. Te lo imaginas???? Partimos de la base de que mi abuela y yo (seguro) no tenemos el mismo concepto de "depravación". Sería inútil.

Creo que por cosas así es por las que es tan difícil erradicar ciertas etiquetas sexistas. Por eso decía yo que hay distintos tipos de machismo (como de feminismo) y este del ejemplo es el sutil, el asumido, el "normal", el aceptado, el de "joer, no es pa ponerse así". Ni siquiera me parece peligroso. Sólo un pelín tontorrón.

Y de ahí el segundo motivo de no enviar el escrito: no quiero exagerar. Y no me gustaría que se me asociara con una de esas feminazis atormentadas y agresivas que lo miran todo con lupa para afearnos la conducta a todos. Temo que eso podría pasar, porque muchas veces las opiniones de estas feministas son tan desproporcionadas que al final casi han conseguido más desconfianza y pitorreo social que otra cosa. Flaco favor. No me gusta ese método de hacer que los tíos se sientan culpables de cada palabra o unos delincuentes.

En fin, que el comentario me pareció desafortunado y cargado de ese machismo tontorrón y costumbrista que ni sabe que lo es y por eso no percibe lo que provoca. Y, qué demonios, no deja de ser mi punto de vista y mi sensibilidad (y la tuya, y quizá la de mucha otra gente, pero tampoco eso nos da la razón per se, supongo)

Así que prefiero comentarlo sencillamente en mi espacio, como una más de esas reflexiones que me hago en voz alta. Y, además, es mucho más productivo saber que me lee gente que me conoce y que dándome la razón o rebatiéndome de pe a pa, al menos seguramente no me malinterpretarán ni sentirán que les ataco. Pero si le envío esto al Herrera quizá piense que es un ataque personal, y para nada. Es una reflexión sobre un comentario (no sobre quien lo hizo, porque no le conozco) y lo que me hizo sentir, y las ideas que me surgieron, y con qué otras situaciones lo asocié, y... (ya me conoces, siempre hilando, hilando, hilando...)

;)

Eli dijo...

Has estao sembrá, niña.
Valga un aplauso integérrimo.

Lenka dijo...

Jajaja, gracias, Eli. Es que a veces el cabreo me inspira.

;)

En realidad, sabéis lo que más me gusta de esta historia?? La cantidad de veces que la sociedad llega a creer en la panfilez de las mujeres, lo mucho que cree tenerlas subyugadas con costumbres ñoñas, lo alto que hablan muchos de ellos de sus hazañas mientras ellas callan... ahora entiendo la beatífica sonrisa (con brillo de picardía en los ojos) que se dibuja en los rostros de algunas mujeres mayores cuando ellos cacarean y se las dan de rajadiablos.

Porque siempre hay alguna osada que no se corta un pelo y suelta lo que se le antoja, pero creo que son muchas más (sobre todo de ciertas generaciones) que callan y ríen, al son de "qué sabe nadie". Y es que una cosa es lo que la sociedad te dicte y otra lo que tú hagas cuando te da la gana. Y lo mismo en estos lares latinos de machismo tontorrón y asumido las hay a montones que no eran "decentes", sólo lo parecían. Como mi ya difunta tía abuela Sabina, la cubana, que cumplió a rajatabla la promesa que le hizo a su padre de jamás ponerse un bikini... pero muchas veces no se pudo nada.

;)

Rogorn dijo...

Será porque mi postura por defecto siempre fue que me parecían tan admirables o cutres por igual los abuelos con sobrinas que las abuelas con sobrinos, pero creo que ahora se está aceptando más igualmente. O al menos, si hay un primer reflejo negativo, luego se corrige.

Yo creo que quizá la reacción a lo de la Regàs, y más en directo, igual fue olfato de veterano, de olerse que comentando esta jugada podía meterse la pata muy fácilmente al hacer chistecejos, a cambio de haber muy poco o nada que sacar ganado. Porque esa es otra también: cualquiera hace chistes de corbatas largas y pitopausias sin que pase nada, pero ponte en el mismo plan con el equivalente femenino ('el mismo' de igual trato humorístico, digo, obviamente), y a ver si no la tenemos.

Y venga con esto pal Patio, no te me hagas de rogar. ;)

Lenka dijo...

Pero fíjate en el detalle: del señor Aguilé tenemos imágenes en su juventud, sabemos cómo era cuando, según él, andaba de mujer en mujer hasta llegar a las trescientas. Y el chiste se refirió a sus corbatas. "Igual las señoras creían que con ese tamaño de corbatas..."

Alguien sabe qué pinta tenía Rosa Regás a los treinta o los cuarenta años? No es actriz, ni cantante. Yo tuve que fisgar por la red y con todo y con eso me costó encontrar una foto suya anterior a los sesenta años. Lo hice por pura curiosidad, porque en realidad no importa mucho. Pero estos señores, sin saber siquiera qué pinta tenía (y si lo sabían son un poco necios, porque la tipa era bien atractiva, mucho más que Aguilé con corbatas o sin ellas) se permitieron una broma cruel. Una broma que dejaba clara la opinión de: "ahora es vieja y fea. Cuesta creer que tuviera tanto éxito".

Es hiriente a más no poder. En mi opinión, claro. Ni siquiera es una broma sobre alguna característica especial que ella tuviera. No es lo mismo que la Marujita Díaz declare que tuvo cientos de amantes y alguien apunte: "los hipnotizaba girando los ojos" a que diga: "pues quién lo diría con esa cara".

Y es que, además, Regás no se tiró el pegote con lo que liga ahora. Se limitó a hacer una valoración de lo que ha sido su vida en cuanto a aventuras sexuales. En su balance le sale positivo. "Follé todo lo que quise". Ni siquiera da cifras. Follase con cinco o con quinientos, es cosa de ella, pero le parece suficiente y estupendo. Ni siquiera presume ni enseña las muescas en el cabecero. Sólo declara que tuvo la suerte de hacerlo cuanto quiso. La broma cruel sobra.

Respecto a la mofa equivalente entre pitopausias y demás, cierto que existen. Pero yo todavía no he oído que nadie se burle cruelmente en un medio público de Heffner, o del desaparecido Iglesias Puga. Se les ríen las gracias y se les considera encantadores y hasta entrañables. Continuamente oímos de tal o cual actor que gana con los años. Todos están espléndidos. Y si se pasean con una novia treinta años menor, hacen una pareja ideal. Y si Puga hacía hijos a los ochenta años (o Quinn, o tantos) se les daban palmotadas en el hombro, machote, está usted hecho un pimpollo. Saque los puros.

De las mujeres sí se hacen esos chistes de menopáusicas, histéricas, arrugadas, esperpénticas y con las carnes caídas. Sólo se las alaba si consiguen aparentar muchos menos años o si se retiran discretamente. Eso cuando no se las olvida directamente.

Me viene a la cabeza todo lo que hemos oído mil veces, incluso de las divas, los mitos. Marilyn era tonta del bote, Joan Crawford una mala madre y una perra sin entrañas, Marlene un zorrón ninfomaníaco, Ava una calientabraguetas aficionada a los gitanillos rudos, Lana Turner una víbora fría y calculadora, la de Havilland y la Fontaine unas gatas envidiosas, la Bette una lagartona con mal genio...

Sabemos de los escandalazos sexuales de Valentino, Errol, Chaplin y muchos otros, pero los ensalzamos y hasta contando aquellos desmanes jamás empañamos lo que ellos eran. Casi al contrario, les da como más glamour. Nadie cuestiona el genio profesional de Allen, por feo que sea y por mucho que se haya liado con su hija adoptiva (porelamordedios, se puede estar peor de la olla???????) Se te ocurre apuntar que igual es un pelín tarado y un pelín depravado y la gente te mira como si fueras de la inquisición. Hombre. Que es Allen. Un genio.

No sé, creo que aún se es mucho más cruel con las mujeres en ese sentido. Es como si la apariencia y la juventud lo fueran todo para ellas, lo mismo da que sean escritoras que ministras. Es cojonudo, pero a veces las peores críticas que he escuchado sobre las mujeres de la política es por su aspecto. Quizá sea por eso, por hartazgo y saturación de pullas, ninguneos y comentarios de escaso gusto, por lo que saltamos más cuando la broma es a costa de ellas. Porque ya está el vaso más que colmado. Y porque bastante es que desaparezcas a cierta edad como para que encima se crean con derecho a negarte el pasado también.

Sra de Zafón dijo...

Que sí Lenka, que si eres tía y hablas sin tapujos, ni aspavientos, de tu vida sexual eres un putón y además si eres escritora y no te pareces a Sofía Loren es increíble que hayas podido follar todo lo que has querido, pero si eres eres tío y hablas de tu vida sexual, aún con aspavientos, e incluso te pareces a Fernando Esteso, lo más normal del mundo es que te hayas tirado a toda cuanta mujer se haya acercado a 100 metros de ti y que te lo aplaudan. Lo más triste es que no solo aplauden hombres, si no un montón de mujeres

Besos

adacaramelada dijo...

Me encanta tu post
Sí que creo que deberías hacer llegar ese escrito al programa

Juan dijo...

Muy buena entrada Lenka. Me ha gustado mucho.

Cada cual tiene la vida sexual que le dé la gana (siempre con los límites evidentes del respeto al otro). Y no me parece ni fantástico ni terrible haber tenido multitud de amantes o ninguno en absoluto. No me dice nada de la persona.

Tampoco veo de donde surge la necesidad de exhibir públicamente tus hazañas con el fin de ser ejemplo de nada. Puedes hablar de tu vida sexual, pero no para que te vean como un campeón, sino por otros múltiples motivos, como el conocimiento o el debate. La competitividad de ser el o la que más, es absurdo y habla poco y mal del que lo practica.

Y sí, se ve de forma totalmente distinta cuando las proezas sexuales son conseguidas por un macho que por una mujer. Estamos demasiado imbuidos de la cultura cristiana en que la mujer sólo se debe dejar.....y con su marido....para tener hijos. Las mujeres no son seres sexuales: ¡¡¡¡SON MADRES¡¡¡. Como si ser madre te asexuara.

Pero por otra parte, el hombre que la mete en pocos sitios está muy mal visto, es poco hombre ¡¡¡y sabe Dios si homosexual¡¡¡.

Al final siempre se critica al que no sigue el patrón que dicta la sociedad. La mujer muy sexual y el hombre poco sexual.....a la hogura con ellos.

Como siempre comentamos, Lenka, menos roles y más respeto individual por las opciones que cada uno tenga en cualquier tema.

Un abrazo y enhorabuena

Jack dijo...

Jodó, prima. Si lo tendremos hablado veces.
Por eso me enervo tanto cuando se asocia el feminismo a la tonterida necia, o se lo ningunea o se lo equipara al machismo... Necesitamos ser feministas un rato, aún.
No me cabe la menor duda, la Regás se ha tirado a todo lo que ha querido porque fue y es una de esas pavas cojonudas y carismáticas y listas. Tampoco me extraña (la erótica del escenario) lo del aguilé. Qué quiés, esteso y pajares eran también unos fuckers natos, y mira qué pintiñas me llevaban.
Si lo piensas, el dios creador de macondo tiene unas trazas (aceptadísimas socialmente) de pederasta que te rilas, y como bien dices, allen estuvo un tiempito (antes de pasar por los juzgaos y ser un padre-esposo "normal") tirándose a su hija.
Eso por no hacer notar a la concurrencia eso que tanto me gusta: sean connery tiene la misma edad que carmen sevilla. Paradojas. Uno es un tío bueno, la otra una anciana en zapatillas.
Total, mucha tela, pero la de siempre. Al final, el síntoma claro de que por fin nos hemos quitado tanta chorrada de encima será la aceptación de la promiscuidad (y la gestión del propio placer) equitativa y democráticamente.

Juan dijo...

Jack, dices que "la Regás se ha tirado a todo lo que ha querido porque fue y es una de esas pavas cojonudas y carismáticas y listas".

Pues fíjate tú por donde que no estoy de acuerdo contigo.

Se ha tirado a todo el que ha querido, y me parece estupendo que lo haya hecho, pero de ahí a que el que lo haga sea cojonudo, carismático y listo, va un mundo. Ni es bueno ni es malo. Cada cual que haga lo que quiera, pero no por hacerlo o no se es ni mejor ni peor.

Un abrazo

Jack dijo...

Estimadísimo Juan. El día que diga que "la gente que no se tira a todo lo que se mueve no es ni cojonudo, ni carismático, ni listo", supongo que me arriesgaré a que me pidas explicaciones. Y si algún día llego a pensar eso, no dudaré en explicártelo. Pero no es el caso.
Dejando de lado que tirarte a todo el que te apetece no requiere sólo la voluntad de hacerlo, por cierto. Y que estrictamente tampoco implica tirarte a toda la población. Sólo a los que te ha apetecido. Nada más. Y nada menos.
Pero contestaba a Len. O más bien al escepticismo radiofónico del que dudaba que la regás alguna vez fue atractiva: sí, lo fue y lo es. Y para eso no hace falta ser especialmente guapa (aunque a mí me lo parece, en sus fotos de chavalina y me lo sigue pareciendo ahora)sino "carismática, lista y cojonuda". Hablo de atractivo en ausencia de belleza. O en presencia de belleza, qué más da. De belleza física estándar, digo.
Contestaba a los que piensen, como decía mi prima, "ahora es vieja y fea. Cuesta creer que tuviera tanto éxito". Par mí la regás siempre ha sido una mujer atractiva, aún ahora, y me parece estupendo que haya vivido su sexualidad como le haya dado la gana.
Sin más.
En cualquier caso, bicos, Juan. Siempre es un placer justificarme con vos.
:)

Lenka dijo...

Si no lo he entenido mal, no se trataba de aplaudir o dejar de plaudir a la Regás por su vida sexual, sino de responder a ese comentario tonto de "pos es fea" con un: "porque tú lo digas, y es que aunque lo fuera, igual tenía otras cosas, como ser cojonudísima, y lista y carismática, que hacían que muchos hombres dieran palmas con las orejas". Creo yo, que me corrija la prima si patino.

Y es que esa es otra. Un hombre feo (hablando en general, que siempre aclaramos que eso del feo y el guapo es subjetivo) si tiene éxito en su vida sexual siempre logra que eso se comprenda por otras virtudes: es que es listo, es que es gracioso, es que es un genio... o incluso razones maledicentes: es que está forrao (y esta última casi insulta más a las mujeres que se le arriman que a él mismo, y ojo, tampoco vamos a negar ahora que si las modelos se pegan por Briatore igual no es por su hermosura, porque nunca he visto yo a una top de esas con un jubileta pensionista de mi barrio. Ni a Dinio con una abuela del retiro, qué coño)

Pero si la mujer no es un bellezón (de nuevo en genérico) siempre sorprende más que tenga éxito. Pos es fea. Pos qué le verán. Pos ya son ganas. Pos qué pinta me lleva. Pos lo tendrá de oro macizo. Parece que cuesta mucho más suponer que tendrá mil cosas fascinantes que atraigan. Pienso que en ese sentido seguimos muy carcas. En la mujer la belleza es primordial. En el hombre es secundaria. Si es guapo, claro, mejor. Pero si no, no importa tanto, con tal de que sea listo, majo o tenga pasta.

Vemos a un futbolista feórrimo con una modelo y no nos choca demasiado. Eso sí, comentamos con maldad que si por el interés te quiero Andrés. Pero estamos más dispuestos a creer que es posible. Será que cuenta unos chistes que te pasas. Buah, es un crack. Mete goles hasta sentao, normal que tenga esa chorba. Luego nos enteramos de que el Pierce Brosnan (que es un señor guapote, pero ojo, mayuco también, que el tiempo pasa pa todos) anda con una señora regordeta que no es ni famosa ni na y flipamos en colores. Anda que no habrá tías buenas. Anda que no habrá actrices ni jacas. Y el tío suelta: "a mí me gusta ella". Y seguimos sin entenderlo. Cuando es así de simple.

Y sí, prima, qué curioso. Lo que se ha llegado a desbarrar de las divas, y, en cambio, a ellos se les han consentido a veces conductas incluso delictivas, justificándolo todo con un "pero es que es un genio". Como si eso disculpara que más de uno y más de dos perdieron el norte detrás de menores de edad, por ejemplo, algunas auténticas niñas. Banda de hipócritas que somos a veces!!!

Elena Garrido dijo...

Bellezas juveniles aparte, alardear de la vida promiscua de uno me parece el tipico defecto de progre rojeras que tiene que demostrar que está superliberado y tal y que no padece el sindrome de "la Guerra Civil y el Franquismo" que tanto daño hizo en la educacion sexual de la gente, no como los derechosos que follan poco, mal y solo con una.
Vamos, que quieren cumplir con un estereotipo penoso.
Asi que Rosa Regas peca de falta de discrecion y elegancia y en todo caso si folleteo con desconocidos pq no supo aburrirse en su asiento quizas deberia haber consultado lo suyo con un psicologo.
Y no lo digo porque sea mujer; si fuera un pichabrava varon diria lo mismo.
Pero supongo que la Regas le da mas importancia a aparentar ser una señora estupenda con una juventud superdivertida que una joya intelectual patria.

Sra de Zafón dijo...

Caray Elena, ni que fueses psicóloga y tuvieses deformación profesional... Me refiero con esto a que un comentario sobre la vida sexual de uno, (sobre uno mismo) no debería dársele más importancia que la que tiene:ninguna. Otra cosa sería el alardeo,pero nadie ha dicho que fuese el caso de la Regás, bueno, perdón tú sí lo has calificado así, algo que me gustaría que me explicasés por qué.
Si resulta que la señora esta ha follado lo que le ha dado la real gana, y habla de ello lo mismo que puede hablar de los libros que ha leído, o de los platos que ha comido, no sé que puede tener de patológico (según tú tendría que ir al psicólogo) por muy desconocido que sea el sr que se tiraba.
¿Falta de discrección y elegancia? ¿Por qué? ¿Hablar de sexo es poco elegante? ¿La discrección consiste en omitir cualquier comentario sobre la vida sexual de uno?

¿Tener que demostrar? ¿el qué?

Uy qué tufillo, Elena, me huele a intento de problematizar en vez de a sana lectura de un comentario sobre la propia vida sexual.
Pero lo mismo la que tiene deformación profesional (me toca lidiar con demasiados terapeutas llenos de prejuicios que estarían mejor calladitos y dedicándose a plantar tomates) soy yo :-)
un saludo
Chusa.

Jack dijo...

.... podríamos dar salmorejo a un continente entero.....
En cualquier caso:
1.- Pa mí follarse sin traumas a todo el que te apetece (siendo esto ni más ni menos que lo que es) es poco más o menos lo mismo que comer sin traumas todo lo que te apetece o ver sin traumas todas las pelis que te apetecen: allá cada cual. No? Como estoi en casa de mi prima excuso aclarar que sin traumas y además con consentimiento mutuo de las partes contratantes. Excuso.
2.- Es necesario aprender a aburrirse en el asiento propio? Quicir, tan válido es decidir aburrirse como decidir levantarse a tomar un café/leer la montaña mágica/leer el Hola/intercambio de pasión con desconocido o conocido afín/hacer sudokus/etcéteras varios. Repito, es necesario que un terapeuta te indique que si no te sabes esperar quietín a que llegue tu avión es que estás aún en tu fase anal prematoria y candosa o que no has matado convenientemente al padre?
3.- Que alguien me dé un listado de las taras de rojeras progres, pordiós, que ahora quedé preocupada y en el google no salen...
4.- Ardo en deseos de conocer las respuestas a las preguntas de chusa también. De paso.
5.- Follarse a todo el que te apetece no implica ser promiscuo. La verdá.


Y sí, prima. Eso quería decir yo. Amos, si no me equivoco, eso dije.

Lenka dijo...

Madre mía, y dónde ponemos la frontera de la promiscuidad??? Con cuántas personas hay que quilar pa ser promiscuo?? Vale si se quila mucho pero con pocos, o con uno solamente? O tienen que ser legión, aunque sea a polvete rápido cada uno? Las dudas me corroen.

La señora Regás seguramente tuvo que oír muchas sandeces sobre su sexualidad y sus libertades (más bien sobre la inexistencia de ambas) y, posiblemente, se le hincharon las narices y decidió que su entrepierna, sus ganas y su aburrimiento eran de ella nada más, no del clero, ni del Tío Pachu, ni de Sección Femenina, ni de nadie. Bien que hizo. Bien que hizo por tomar las riendas. No por follar mucho ni poco. Por follar lo que quiso y con quien quiso. Porque si hubiera tomado esas mismas riendas para decir: "pos ahora no me da la gana y por muertos que me muero célibe", pues ole sus narices también. No seré yo quien juzgue las opciones púbicas de nadie.

Falta de elegancia? Eso si hubiera dado nombres, como hacen otros y otras. De lo propio de uno se puede hablar siempre que a uno le plazca. Es como si hubiera dicho que se zampó ella sola tres containers de chocolate con almendras. Allá ella. O como si hubiera dicho que no consiguió nunca leer a Joyce porque se moría de aburrimiento. Po fale.

Traumas de rojos? Madre, qué miedo me da eso. Por roja, digo. A ver si voy a estar traumada sin saberlo!!!! En fin, si el hecho de vivir como a uno le plazca es un trauma, pues viva el desequilibrio mental. No creo que haya que demostrar nada, además. Follar mucho o poco no demuestra que seas mejor, peor, más listo, más rojo o más liberado. Conozco a mucha gente monógama convencida y poco amiga de aventuras de una noche y no les considero en absoluto carcas ni cerriles. Lo más liberador que conozco es vivir como realmente deseas, y siendo capaz, además, de respetar a quienes prefieren vivir de otro modo. Entender que la felicidad es personal.

No creo que nadie folle más o menos por compararse con nadie. Yo no follo para darle a nadie en la cara. Si los de derechas follan poco mal y sólo con uno (ein? Eso habría que verlo) mejor o peor para ellos. Si no follan más deseando hacerlo, es su problema. Si los progres follan sin ganas por hacer números, peor para ellos. En cualquier caso es peligroso etiquetar a la gente. Sobre todo porque, honestamente, la gente es mucho más que una etiqueta. Y otras veces hay una enorme diferencia entre lo que rajamos y lo que hacemos. No somos tan transparentes. Ojalá. O gracias a dios.

Lo que más me fascina es esa idea de que los que follan mucho deberían ir al psicólogo. Entonces es malo follar? Tenía razón Franco, tiene razón el Papa???? A todos los que nos gusta follar se nos ha ido la olla? Sería más sano esperar un vuelo jugando al super mario? Meditando? Mirando al vacío? Escuchando ópera? Cada cual que espere como guste, verdad?

Qué manía tenemos en considerar que todo lo que no entra en nuestros esquemas es forzosamente malo, raro, enfermizo. Seguramente yo nunca me tiraría a un desconocido en un aeropuerto. Por pudor, porque no me daría la gana, porque me daría miedo, por timidez, por principios (míos y personalísimos), por mil millones de razones. A lo mejor desearía hacerlo y no tendría valor. O a lo mejor no me apetecería ni borracha. Pero no se me ocurre criticar a quien lo haga, más allá del mero cotilleo. No se me ocurriría aventurar que es una conducta enfermiza y que se necesita un psicólogo. Por qué? Qué tiene de malo? Gestionar la sexualidad de uno no me parece nada enfermizo. Hemos pasado de pedirle permiso al cura a pedírselo al psicólogo???? Es otro tipo de dictadura????

Juan dijo...

No sé si Elena se refería al mismo comentario de Jack que me chirrió a mí, que después ella misma explicó. "la Regás se ha tirado a todo lo que ha querido porque fue y es una de esas pavas cojonudas y carismáticas y listas".

Este comentario se daba a una interpretación de que tirarse a muchos es de pavas carismáticas, cojonudas y listas. Ya lo puse previamente y ya lo contestó Jack.

La vida sexual de cada uno debe ser libre y que cada cual haga lo que quiera, pero el tirarse a muchos o pocos nada tiene que ver con lo carismático, cojonudo y listo. Conozco a algunos sementales de gimnasio sin el más mínimo cerebro, pero con mucho músculo, que se han tirado a cientos y eso no los hace mejores ni peores.

No sé si se refería a este comentario Elena.

Un abrazo

Lenka dijo...

Pero claro, es que el ser cojonudo y listo no es por tirarse a muchos o a pocos, es por tirarse o no tirarse a quien uno considere oportuno, ni más ni menos. Nadie defiende que follar más es de guays y menos de tontos. Qué va. Es irrelevante. Yo creo, y pienso que también Jack y Juan, y seguramente todos, que lo inteligente es vivir la vida como a uno le parezca y le haga sentir estupendo, feliz y realizado.

Nadie nos va a vender la moto de que follar mucho es de degeneraos, o poco de rancios. Cada cual tiene sus recetas y sus medidas, y es absurdo imponérselas a nadie. Quién soy yo para ir a mi amiga tal y decirle que eso de ser formal y monógama es de ñoñas, que para realizarse tiene que ser hipersexual y liberadísima? Quién soy para decirle a la hipersexual que no se respeta a sí misma, que si a ver si eso es un trauma mal curao, que si qué depravación y qué tristeza de vida? Lo que vale para mí no tiene por qué valer para otros. Faltaría.

No sé por qué nos empeñamos en que el que vive de otro modo es un desgraciadito digno de lástima. El "recatado" es un ñoño y un carca y seguro que se muere de envidia por nuestra libertad sexual. El "promiscuo" es un superficial y un degenerado que seguro que en el fondo lo que desea es que le amen y le respeten. Pues igual sí, pero ojo, igual no. Y mira, si uno vive al revés de cómo desea, problema de él. Si los hay que se dejan llevar por el qué dirán, peor para ellos. Y ojo, que eso puede pasar tanto para que el que va de recto y casto sin serlo (o sin desearlo) y para el que va de rajadiablos y ultraliberal sin serlo (o sin que eso le haga realmente feliz). Pero es que también los hay, aunque nos cueste creerlo, que son tal y como desean y son felices así. Y no creo que tengamos que buscarle la vuelta a eso, ni imaginar traumas, ni cinismos varios, ni menear la cabeza con soberbia pensando: "pobrecito... qué sabrá él... qué manera de joderse la vida a lo tonto".

Juan dijo...

Exacto Lenka.

Un abrazo